¿Qué es un challenge de internet?
Cada cierto tiempo, las redes sociales se inundan de publicaciones en las que los usuarios realizan un desafío, suben un determinado tipo de foto o se suman a alguna causa benéfica. Usualmente estas publicaciones son parte de algún challenge, un término anglosajón que en redes sociales es utilizado para definir una tendencia viral en la que se invita a los usuarios a hacer algo.
Estos retos generalmente comienzan como una broma entre youtubers o instagramers a las que se suman sus seguidores y que posteriormente se viralizan, hasta el punto de que tanto celebridades como personas anónimas terminan participando. Y, aunque esto no es algo nuevo, desde hace unos meses hemos visto cómo cada vez son más frecuentes y complejos.
La etiqueta challenge ya es tan común en redes que muchas veces los usuarios utilizan solo ese hashtag para anunciar su participación en un reto. Al momento de escribir este texto, en Instagram había 13,3 millones de menciones con este término y, si se busca en Twitter, es posible apreciar cómo la búsqueda arroja nuevos resultados cada segundo.
El editor del sitio web Know your meme, una web dedicada a la recopilación e investigación de memes y fenómenos de internet, Brad Kim, contó al New York Times, que la tecnología ha sido clave en la evolución de esta tendencia. Hemos visto cómo los challenges han pasado de ser recopilaciones sencillas de fotos a acciones y contenido que toma tiempo preparar.
¿Qué tipo de challenges se encuentran en redes sociales?
La posibilidad de ser relevante, aunque sea por un breve periodo de tiempo, causa que en la Internet surja todo tipo de contenido y los challenges no son la excepción.
En los últimos años se han viralizado algunos retos que, además de absurdos, son peligrosos. El Condom Snorting Challenge, en el que las personas se introducen preservativos en la nariz para luego expulsarlos por la boca y el Bird Box Challenge, en el que las personas se vendaban los ojos e intentaban realizar tareas del día a día, son solo algunos ejemplos.
Esto ha obligado a YouTube a modificar sus políticas de control de contenidos. La plataforma audiovisual borrará los vídeos de bromas o retos que pongan en peligro la salud física o psicológica del usuario, según se indica en el apartado de preguntas frecuentes de su web.
Pero no todo es malo, hay algunos que son divertidos e inofensivos. Hace tan solo unos meses celebridades, amigos y compañías de todo el mundo eran parte del #10YearsChallenge. Este reto consistía en hacer una comparación de cómo hemos cambiado en los últimos diez años haciendo un montaje fotográfico con una foto de hace una década y otra actual.
Y hay algunos, que además de ser divertidos, sirven para concienciar sobre un tema importante y marcar la diferencia. En el verano de 2014, la red se inundó con vídeos de famosos y anónimos echándose un cubo de agua helada encima, como parte del Ice bucket challenge.
Al realizar el desafío, se debía nominar a otra persona para que donara diez euros a la ALS Association, una organización estadounidense que recauda fondos para investigar y tratar pacientes con esclerosis lateral amiotrófica, e hiciera lo mismo en 24 horas y que así continuara la cadena.
Hace algunas semanas también se viralizó el #TrashTagChallenge, un reto viral que consiste en limpiar playas y otras zonas llenas de basura para dejarlas impolutas. Este challenge contra la basura está creciendo gracias a que las personas que participan en él desafían a otras a que también participen.
¿Debe mi marca participar en un challenge?
La respuesta es sí, siempre y cuando se haga con sentido. Las marcas pueden participar en un challenge que la ayude a contar algo de su propuesta de valor o pueda relacionarse son su storytelling.
Muchas veces estos retos de internet pueden ayudar con el employer branding de una organización y a fidelizar el capital humano. Ya lo veíamos en 2013 cuando grandes compañías como Rovio, responsable de la franquicia Angry Birds, y Facebookcompartían vídeos de sus empleados bailando el Harlem Shake.
El Harlem Shake es un vídeo con un formato en el que durante los primeros segundos un personaje baila con un casco o un disfraz mientras todos a su alrededor permanecen impasibles. A los 15 segundos, la música cambia, con la frase “Do the Harlem Shake” y todos comienzan a bailar descontroladamente.
Un challenge también puede representar una oportunidad en tu estrategia de marketing de contenidos. Al ser virales, nos permiten contar algo de nuestra marca u organización mientras nos introducimos en la conversación que domina las redes sociales sin ser invasivos. Así lo hizo el Museo del Prado al sumarse el #10YearsChallenge.
En su cuenta oficial de Twitter publicó tres tuits en los que se veía el antes y después de algunos personajes famosos de la historia, a través de sus pinturas. La primera publicación de esta serie tenía como protagonistas a Las meninas y ha conseguido más de 3700 retuits y 7.700 likes.
Alana es una Consultora de Comunicación omnicanal. Si quieres saber en qué fenómenos virales debe participar tu proyecto o necesitas ayuda con la forma en la que se comunica tu marca, escríbenos sin compromiso.
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